Gracias por aguantar tanto en tus paginitas. Gracias por abrirme tus orillas y tus rincones. Gracias por tu amistad de letritas y espacios. Infinitas gracias por estos maravillosos años. Vendré a verte de vez en cuando, para no olvidar que todo pasa...lo bueno y lo malo también.
Y bienvenidos, mis caballos de libertad.