Me ha costado descansar. Mi mente sigue trabajando a mil por hora. Me desperté a las 4.30 ahí me quedé haciendo mantra, meditaciones, hasta hipnosis para poder quedarme dormida a las 7. Y ahora, otra vez muerta de tuto. Pero encontraré la forma de descansar y canalizar mi energía. Porque finalmente esto es porque no estoy haciendo mi labor. A reconectarme. Esa es mi pega de estos días. Ayudar a quienes están como yo. Vibrar como las abejitas, positivamente, para crear. Hay muchas cosas que ocurren a mi alrededor, pero si soy consciente, a mi, en este momento preciso todo es calma. Estoy en mi camita, mirando por la ventana. Lo demás es paja molida que crean mis miedos y demonios. Ojalá todos pudiéramos hacer el mismo ejercicio. No llevarnos por el mar de posibilidades. Quedarnos en la orilla, bien plantados en la arena, observando.