Hoy fui a un acto donde bailaba mi Caturri. Ella la loquita, para variar media despitada pero igual se las arregló para seguir su coreo, especialmente porque su compañero no llegó y debió bailar sola, sin pareja, un trote nortino. Pero igual salió adelante y lo hizo muy bonito.
Mañana tengo clases y tengo una flojera espantosa, ojalá que el sueño sea reparador y se me quite, la lata.
Voy a dejar esta canción que le regaló alguien con mucho amor y que encontré en un cd muy lindo de la Cata, con unas fotos hermosas, de cuando tenía 5 años y quedaba mirando con su cara de viejita sabia: Nada, te amo... cuánto hemos viajado desde entonces, cierto Brujita? llevamos el ritmo de la mar ;)