Qué raro se me ha hecho este mes. A ratos el tiempo lento y cuando pongo atención, ya pasó una semana. Los magos dicen que estos días han sido muy energéticos y así lo siento. Mucha liberación de cositas viejas. Mucha gente que se vuelve a hablar después de décadas. Lo escondido, aflora. Como sea, todo está fluyendo para algún lugar.

En mis sueños, se que sigo trabajando. Mis dolores, miedos y alegrías se muestran ante mi sin límite. Y a pesar de usar caretas a veces, tengo que quedarme con la emoción que producen en mi y ver desde donde vienen. Porque las emociones se quedan en ciertas partes del cuerpo y desde ahí van causando todas las demás molestias.

Cuales son mis tareas de estos días? Los registros de abandono, de perder lo que se quiere.  No sé cuánto demore, pero estoy en ese proceso de buscar donde habita en mi esta emoción y dejarla ir. Hoy un sueño me recordó qué alguna vez, o quizás más, no me atreví a preguntar algunas cosas, solo para no incomodar y ser dejada. Hoy mi energía actual, enviaría a la soberana mierda, a cualquiera que me hiciera sentir así, pero antes no tenía ese arraigo, esa fuerza soberana de sentirme fuerte y capaz. Y esa emoción quedó por ahí en alguna de las cajas de mi alma. Estoy en el proceso de dejarla salir y tirar la caja. Y mi cuerpo tb lo sabe.