....delicia de delicias....ayer por fin pude volver a bailar, y no hubiera parado si mis alumnas ya no hubiesen estado que morian de un infarto....
...tengo un mundo de contradicciones dentro. Paso en mis recuerdos , de tener angeles a demonios, y en la vida real, me encuentro con egoísmos e intrigas que dañan a los que más quiero. No puedo quedarme mirando sin hacer nada, sin tomar una actitud...Me siento como los antiguos samurais, sabedores de su poder para matar, pero sin deseos de ocuparlo. Porque un samurai sabe, que cuando saca su espada de su funda, ya lo hace para aniquilar, para matar, para dañar. Y yo, no quiero pelear.Pero tampoco puedo dejar que hieran, ofendan y engañen a los que quiero.... Es muy fácil morirse y dejarle los cachos, las deudas y las peleas al resto, y más encima, mentir,para que lo recuerden como una buena persona.....No es fácil la pelea que estoy dando....por eso, bailar, ha sido como un mar de relajo, paz a mi corazón, y feliz encuentro de cosas nuevas. Tengo una alumna nueva francesa que es un encanto y a mis alumnas antiguas, cada vez más diestras......Y unas inmensas ganas de bailar, bailar, bailar todo el día....