Días de nuevas amistades. Fuimos con mi amor, a las cenas de camadería a las que estabamos invitados. Una fue el miercoles, donde fuimos juntitos, y conocimos a un grupo de gringos muy simpáticos que venian recorriendo todo el sur del país , dando sus charlas en los distintos clubes . Había una dueña de un museo fabuloso que esta abocado a la recopilación de material de investigación de un matrimonio de fotografos norteamericanos en sus viajes por el mundo; un coleccionaste de arte francés, un chico super joven que trabaja con su familia en su tienda y dedica gran parte de su tiempo a estudiar ( tiene varios especializaciones en arte, es concertista en piano, habla 5 idiomas y ha viajado por 30 países con apenas 23 años!), un corredor de propiedades que encabeza muchos de los operativos de lentes que el R hace en varios países y finalmente, un profesor universitario en matemáticas, él unico con origen latino (colombiano) y todos muy muy simpáticos. Compartieron sus experiencias de vida y de familia, así como su trabajo en R.
Ayer me tocó a mi solita, pk Mario se quedó en casa. Ayer eran las damas las que organizaban todo, en honor a una abuelita muy particular que se ha destacado en la comunidad por ir a visitar a los enfermos, a los presos y dar ayuda a quien le toque su puerta o no. Es un encanto de sencillez, y fue una linda sorpresa darme cuenta que era abuelita de una amiga! Y lo mejor de todo, es que no me sentí extraña, pk las mayores del grupo me nietizaron inmediatamente, jajajajajja y lo pasé super bien conversando con todas ellas y ellas a su vez, contandome sus experiencias y hasta tallas de cenas a las que asistió mi papá. Bueno, además que nada me parece muy extraño, pk cuando era chica me tocó ser presidenta del club pero en la versión teen así que tampoco no andaba tan perdida. Así que lo más probable es que siga yendo y participando con ellas.
Lo que más rescato: la cordialidad y buen ánimo de todos para disfrutar del tiempo, de la experiencia de otros. Y el tremendo valor de esta abuelita para permanecer firme en su fe, en su amor a Dios y a la Virgen como dice ella, para no faltar ningun día en sus casi 60 años de ayuda social a ver sus enfermos, a sus presos, a rezar con ellos, a llevarle dulces y a escucharlos. La sencillez de su amor que no distingue para donde va. Y como me dijo Doña Pepita, de 90 años!, (que resultó ser mamá de una doc que se parece a mi mami, jajajjaja) " el secreto para llegar así de bien es amar. Amar a manos llenas y no reprimirse de nada, no temerle a las cosas, y disfrutarlas sin retener. " Volví a casa con una flor de regalo y el corazón lleno, pero llenito de ilusión....

Amor, no estamos tan lejos ni perdidos....a nuestra manera....siempre, a nuestra manera...

p.d: Vi una foto que quería ver. Qué hermosa luce en su día!