Tengo un pequeño romance con un café colombiano que encontré en el super, al cual no le tenía mucha fé, temiendo dolor de guata, como me pasó hace un tiempo, cuando se me ocurrió cambiar de marca. Pero con éste, estamos de lo más amiguis. Y reconozco, que cuando lo veo en mi taza, saliendo con ese vapor tan rico, se me hace agua la boca....Y aquí estoy, disfrutandolo lentamente...(goloza, jajajajja)

Da lo mismo si el café o el té es premium vip o cajita azul rendidora. Lo genial es poder disfrutarlo. Si viene de alguien que te abre su casa, comparte su tiempo contigo, y su taza con un café, es mucho más sabroso todavía. Tengo guardado en el alma, muchos hermosos momentos con tacitas de por medio. En mi práctica, unos tecitos maravillosos, con familias muy humildes, cuyo tecito era un tesoro. Empecé con Mario por 3 cafés y aquí vamos, jajajajjajaj Otros cafés, mezclado con leche, como rito de amistad que tengo con un ingrato con el cual no he hablado en dos meses, pk se puso a pololear y se quedó leso, jajajajajajajjaja
Una vez, un café se grabó en mi alma, en medio de la noche...Sentarse, compartir, mirarse entre las tacitas, abrazar la taza, mirar su oscuridad y a veces, perderse en ella..........Quieres tomar un café conmigo?

(por antigua y por wena, esta canción...)