Recuperar la ilusión de las cosas o de las personas es simplemente genial. Ver como los amigos se renuevan tambien lo es.He visto las ultimas fotos de Rodri, chocho, cayendo la baba por su nuevo amor, esa cosita chiquitita hermosa, que es su hijita nueva, recien nacida. Y no dejo de recordar lo mal que estaba hace un tiempo, con una historia de matrimonio de terror, y ahora reventando de chochera, con su pareja nueva y su hijita. Qué lindo es ver como hay gente que evoluciona y sigue camino por la vida. Pero igual estan los contrastes. Tengo una amiga, que recien separada, ve como su marido, ya tiene nueva pareja como si nada. Y trata de armar su vida de nuevo, de salir con sus hijas, y no caer en la depre. Y me pregunta que pienso. Sólo le digo que su pareja, no sabe donde está. Eso. Lo digo, sabiendo lo que se siente. Lo digo a través de la experiencia. Uno cree saber, sentir, pero la verdad que uno esta perdido dentro de sí, y se agarra de cualquier tabla flotando, y le pone título de pareja nueva, amiga(o), carrete, casa nueva, que se yo....Pero sólo es el tremendo miedo a decidir estar solo. Y no es que una sea una persona maquinadora y mentirosa, buscando aprovecharse del mundo. Lo que ocurre, es que de verdad nos creemos el cuento de la "nueva oportunidad", nos contamos la historia que queremos escuchar, y creemos con todo el corazón en ella. Pero en algún momento, el velo se despeja y te das cuenta que no es lo que creías, que esa persona no te llena, que esa casa no es tu casa, que te has hecho lesa como querías. Y la otra persona, no tiene idea que diablos te pasa. Y vuelve la espiral de la decepción y "querer estar sola". Pero tambien puedes elegir, salir del espiral, "mamarte" la soledad un buen tiempo. Aguantarte las ganas de empezar otra vez, hasta sentir que de verdad puedes. Aprender a amar, cosa que juntar tu vida a otra persona no sea por necesidad ni porque te sobra. Sino porque es El momento. Y amar, es harto más complejo que pasarla bien cuando es bueno, compartir la comida que te gusta, tener muchas fotos juntos, jugar a la casita, cantar o leer poesía. Es mucho más jodido, pero tambien más inmenso. Es morderte la rabia cuando al otro solo quieres sacarle la cabeza por estúpido, y respirar hondo recordando, que también te equivocas, que también haces estupideces y nadie te ha descabezado todavía. Quedarte, cuando sólo quieres salir arracando y que se joda el mundo. Enamorarse pasa a cada rato, en cambio amar, es un ejercicio....
Ayer, por ejemplo, le apagué la tele a Mario y le canté un par que le tenía guardadas hace un rato y me estaban molestando. Sobre todo, en como el ambiente de su trabajo nos afecta en casa. Porque lo veo preocupado, lo veo ansioso, y hasta decepcionado de muchas personas que prometen millones de cosas y despues se hacen las loquitas. Y la rabia la tenía yo con él, por no ser capaz de dejar las cosas aparte. Por dejarse influenciar de esa forma. Y tenía unas ganas de zamarrarearlo y mandarme a cambiar, porque prefiero eso que enfermarme de los nervios. Pero tambien ví al hombre, al ser humano, triste porque tuvo todo el derecho a ilusionarse con algo que no se ha dado, choreado, de aguantar gente que no quiere soportar porque es responsable de su familia; sobre todo vi al hombre, que aguanta por la tranquilidad de los que viven con él, o sea, de nosotras. Y ví tambien, que no renuncia a sus sueños. Sólo que cuando se desespera, no sabe como encauzarlos para llegar a ellos. Como cuando bajas por un río rápido y no sabes si te das vuelta, o llegas al final. Y ante ese hombre, yo no puedo dejar todo tirado, sin poner amor por delante. Y con amor, recorrimos estos años para que recuperara su ilusión y su tranquilidad. Y acostadita en mi cama, con él durmiendo al ladito, más aliviado quizás me di cuenta que el El amor, el amor de verdad, se queda cuando todo se va...
