Hay personas que tienen el don de hacer de cualquier día una Navidad. Ese es el caso de la Susanita. Ayer por la tarde me llegó un hermoso paquete con unos regalos maravillosos, que ya se estan integrando a mi vida : una carterita preciosa, unos posavasos con un olor que me tiene relajadísima y con la nariz pegada en ellos y un anillo de madera hermoso. Todo hecho por ella; por eso es que le digo la Señora y Maga de las Lanas, porque sale pura magia de sus manitas.
Gracias Susanita.

Han sido días de renovar lazos. Mi cuenta de amiguitos en facebook sube cada día, con los compañeros de la U, los ex pololos, los compañeros de carrete, de la vida...Estan impactante verlos en sus propias vidas y mundos, muchos con hijos, casados, en otros países, etc. y no como los guarda la memoria: flacos muchos de ellos, medios hippies, wenos pal carrete jajajjajjaj. Son la gran mayoría hombres y mujeres de familia, hermosas personas compartiendo el mismo planeta.

Y han sido días de amar. Días para reflexionar despues del test de la sussy, sobre los deseos de la vida. En el 2005 hice un ejercicio parecido y siento que muchos de ellos se han cumplido o han evolucionado. Bailo y canto sin miedo, ante otras personas, pk ya no me da miedo hacer el rídiculo o pasar vergüenza, porque sobre todo, me siento segura que al hacer algo que deseo desde el corazón, no puede resultar estúpido. O por lo menos, no lo es para mí. He aprendido a gobernar mis caballos internos, no amansandolos, sino "escuchandolos", a saber que cuando se encabritan , algo les molesta, algo los inquieta o asusta. Y sobre todo, a dejarlos correr...
Aprendí también a mantener mi verdad, al costo que sea. Eso no signifca no reconocer cuando me equivoco, sino no cambiar mi vida por lo que digan los demás. Aprendí, que todos los lugares, incluso los que estan dentro de mí, son mis playas. Y no tengo que ir hasta la orilla para sentir el mar. Solo tengo que cerrar los ojos, porque él esta dentro de mí.
Aprendí, que los días son la semillita del que viene despues, pero siempre se puede partir de cero. Siempre se puede perdonar, siempre se puede volver y siempre se puede recibir. Porque si no lo hacemos, nos negamos a una experiencia de amor que nos puede cambiar la vida completamente. Porque nunca se tiene la certeza de que las cosas serán así como las sabemos o como las planeamos. Al no abrirnos al perdón, sólo somos la mitad de ser humanos. El perdonar nos hace completos y divinos.

Aprendí en carne propia, que el Amor, en todas sus formas y colores, tiempos y lugares, te transforma. Y que el amor a veces viene en una canción, en un beso robado, en un dibujito, en un masaje de pies o en una carterita. El amor siempre busca llegar al Amor.