El sol no sabe si quedarse en cama o salir, pero al parecer, a esta hora ya, 4 de la tarde, ya le dió por ánimarse y salir de las nubes. El viento tb anda medio travesuelo, dando vueltas y levantando las puntitas de las olas marinas que se ven desde mi ventana...

Por la mañana, hoy si tuvimos clase! eh!eh!eh!, me hacía faaaaltaaaa, desde el fondo de mis huesitos, jjejeje, es que hacer clase no es tan relajante como dejarse dirigir...nuestra profe quiere que bailemos al aire libre el otro sábado, en la plaza, pero no sé.....prefiero ensayar y darle a cada día su afán. Si resulta bien y si no, de todas formas, con las niñitas tengo que preparar algo para el otro mes, cuando finalice su taller. Y para qué vengo cosas, es que igual me da vergüenza!!!!! Ella, la tan pulenta se asusta toda!jajajjajjajajajjaja


Hace un rato, acompañé a la Angela al médico, porque su licencia tenía problemas y necesitaba una receta para un medicamento. Al parecer, quedó muy bien de su operación y yo le hago reír, sólo porque sé que no puede, ajjajajajaj qué mala!!! Mi amiguita, que todo se lo toma con una sonrisa, o bien, que entre las dos, nos reímos de las desgracias. Mientras esperabamos a ver al médico de la Angie, pasó por mi lado, el otro doc. Pasó como siempre, casi corriendo, con los pies casi en puntita, y sin verme claro está. Y despues de dejar a la Angie en su casa, mientras me venía manejando, recordaba cuando iba a verle a esas mismas horas de guardia, y él venía por esos pasillos o bajaba por la escalera, corriendo contento para abrazarme y decirme "hola negrita hermosa" ...No había mucho tiempo, porque me sentía egoísta de separarlo de esas personas que tenían dolor y que necesitaban de él. Entonces, para estar más cerquita en su día, le preparaba comiditas, ensaladitas varias, o chocolates, como la primera vez que me atreví a dejarle algo... Lo amé como aman los niños, que se dejan cartitas, flores, chocolates, y que saltan de alegría, saltan a encaramarse cuando ven a la persona que quieren, como mi Cata!, ella se trepa como mono sobre mí. Y yo, con esos minutos robados a la guardia, me sentía la estrella más brillante de la galaxia....Quizás por eso, cuando lo encuentro, no le miro a los ojos, porque como los niños taimados, me da vergüenza que pueda notar en mis ojos, que una parte de mí, se volvería a colgar de sus brazos otra vez....Uyy, ya lagrimón....

...menos mal que aquí en la net,no quedan las marquitas como en las hojas....Tendría la pantalla llena de goteras a esta altura de los años....jejejejej...he aprendido a reír aún con lagrimitas....para algunas cosas parece que he crecido, mientras que para otras, parece que sigo en los 5 años.... para algunas personas, no dejamos de estar en sus ojos, y para otras, apenas nos notan... Pero yo si lo ví...Yo sí....desde lejos...