Con puros cortes de luz pasamos el día. Mario estuvo trabajando durante la noche, despues de dejarme dormidita, hasta que se cortó la luz, tipin 5 de la mañana. De ahí la luz volvió por parte a Ancud, pero a nuestras oficinas, hasta despues de las 5 de la tarde. A esa hora ya nos habíamos venido a casa de que rato, a regalonear antes de que viajara a Stgo. Por suerte, ya el otro fin de semana se queda en casa conmigo.
Al parecer, mañana tendré que volver al Doc. Este romadizo no me para, y ahora siento un par de ganglios inflamados en el cuello, por debajo y detrás de la oreja, sobre todo el del lado derecho. Pero bueno, no hay de otra y al doctor de nuevo.
A dormir, a descansar...