Estoy leyendo dos libros. Uno de ellos se llama Siddhartha y el otro, es de feng shui. Siddhartha, es de un autor aleman que se llama Hermann Hesse. Como dice la referencia de la contratapa, este libro "relata la vida de un hombre para quien el camino de la verdad pasa por la renuncia y la comprensión de la unidad que subyace en todo lo existente". No puedo comentar más porque recien lo voy empezando pero me agrada. Es como estar leyendo a Osho.
El otro libro se llama "El Arte del Feng Shui" y es del Sarah Rossbach, quien traduce y expone las enseñanzas de su maestro chino Lin Yun. Es la segunda vez que lo leo, porque no es tan fácil de ir asimilando. Son muchos los datos y consideraciones que el feng shui sostiene para armonizar el chi ambiental e interno. De hecho, aquí en somos bien apegaditos a este sistema. Pero de vez en cuando como que lo dejo y me queda el caos. Me hizo genial los cambios en mi dormitorio. Cambie de posición mi camita y ya se me esta pasando ese dolor de cabeza horroroso con que amanecía por las mañanas. Y de a poco, voy mentalizando la casa en el campo, para ir encontrando las areas favorables en ella y las cosas que hay que cambiar.
El jueves me llamó la Margarita. Va mejor con su proceso y claro, pegadas una hora al telefono hablando de lo divino y de lo humano. Le conté que esta semana me había acordado harto de ella, por el tema de las regresiones. Ella se angustia porque el corazón no se le sana con la rapidez que una quiere. Pero yo le explicaba que eso no tenía nada de malo, porque así, podía encontrar las cosas que estaban más profundas dentro de ella para determinadas actitudes. Yo le decía, que hace poco había aceptado,( porque de darme cuenta hace harto rato ya), que cuando estoy como media disconforme con mi presente, yo me refugio en el pasado. Y que no es más que eso. Una evasión nostálgica, con toques de romanticismo. Soy yo la creadora de mis mundos, sólo que a veces, no se dónde ponerlos, como expresarlos, como pedirlos. Eso simplemente. Por decirlo de otra forma, dentro de mí, en lo más profundo de mí, sé que el amor al ñeco se me murió hace muchisimo rato: lo que añoro, es mi capacidad romántica de ese tiempo. Mi estado de encantamiento y baboseo. Porque concretamente, si hubiese que medir o comparar muestras de amor hacia mí, hay una larga lista de amores míos, que le darían cancha tiro y lado. Entonces, no se trata de que siga enamorada de él. Yo a veces, recuerdo con nostalgia lo enamorada que me sentía. Lo cual no es lo mismo. Es tambien fuerte todo el proceso vivido, porque de alguna forma, desde ahí que rompi el cascarón y me metí a este camino. En la cotidianeidad de las relaciones y de los años, no es tan fácil sentirse "enamorada" todo el rato. Pero aún así, Mario sigue siendo para mí, el mejor compañero de mi vida. De esta vida simple, de 24 horas al día, de 365 días al año. Tengo libertad para ser libre, de ser como sé me dé la gana, de ser irónica y conciente al mismo tiempo, de arañar y acoger, de odiar y amar. De quererlo con locura y al rato no tanto, jajajajaj y eso, es libertad pura. Y eso con el ñeco yo no lo tuve; siempre temerosa de no gustarle, de que me hiciera responsable de su inestable alegría e ilusión, siempre delegandole al otro su falta de tolerancia hacia el mundo, y con esa "exclusiva" forma de ver el mundo que no gustaba de las miradas ajenas. Y eso es suficiente razón para mi. Libertad libertad libertad....amada libertad, de ser quien se es, y ser amada por ello.
Ayer compartí con varias personas y con el blog tb el video que me enviaron por FB sobre las ballenas. Mi negrito lindo lo tenía agregado hoy en perfil tb, y genial, porque así se suman más personas a considerar y tener presente a estas maravillas de la naturaleza. Cuando miro por las ventanas de la casa, siempre estoy atenta con los binoculares a ver si veo alguna aletita sobresaliendo del agua. Es a ese moreno hermoso, al cual le dedico esta canción, por el puro deseo de regalarsela y desearle todo lo bueno y lo hermoso de esta vida y de las otras también. Porque mi libertad no me pone límites en cómo debo querer a mis amigos. Y a mis amigos, yo los quiero con TODO.
Que el maquillaje no apague tu risa,
Que el equipaje no lastre tus alas,
Que el calendario no venga con prisas,
Que el diccionario detenga las balas,
Que las persianas corrijan la aurora,
Que gane el quiero la guerra del puedo,
Que los que esperan no cuenten las horas,
Que los que matan se mueran de miedo.
Que el fin del mundo te pille bailando,
Que el escenario me tiña las canas,
Que nunca sepas ni cómo, ni cuándo,
Ni ciento volando, ni ayer ni mañana
Que el corazón no se pase de moda,
Que los otoños te doren la piel,
Que cada noche sea noche de bodas,
Que no se ponga la luna de miel.
Que todas las noches sean noches de boda,
Que todas las lunas sean lunas de miel.
Que las verdades no tengan complejos,
Que las mentiras parezcan mentira,
Que no te den la razón los espejos,
Que te aproveche mirar lo que miras.
Que no se ocupe de ti el desamparo,
Que cada cena sea tu última cena,
Que ser valiente no salga tan caro,
Que ser cobarde no valga la pena.
Que no te compren por menos de nada,
Que no te vendan amor sin espinas,
Que no te duerman con cuentos de hadas,
Que no te cierren el bar de la esquina.
Que el corazón no se pase de moda,
Que los otoños te doren la piel,
Que cada noche sea noche de bodas,
Que no se ponga la luna de miel.
Que todas las noches sean noches de boda,
Que todas las lunas sean lunas de miel
