Me duelen los brazos de tanto mover cajas y cargar cosas, pero nunca me habian dolido con tanto gusto. Es que estoy tan entretenidda con el armaje de la casita, que solo en la mañana del día siguiente noto que me duele todo. Ayer, tuvimos nuestra primera cena con Cata incluida (ya habiamos cenado los dos solitos) estrenando el comedor nuevo, y poniendo de individuales, los pedazos de carton corrugado donde vienen envueltas las cosas jajjajajajajajjajjaja...ellos muy divine comiendo en mesita de vidrio con carton de caja jajajjajajjajjaja...Igual que la cortina del baño que se ve preciosa, colgando de los pedacitos de alambre porque no he ido a comprar las argollas todavía jajjajajajjajjaja. Pero ya esta tomando forma. Ayer, muy temprano llegó el camión de Pullman cargo a dejar los paquetes que mario habia mandado de stgo. Ni en navidad me habia llegado tanta caja para mi sola! jajajajajjajjaja Así que en la tarde, nos fuimos armando de paciencia con la Cata y fuimos sacando unas sillas, revisando las instrucciones, porque son una especie de mecedoras modernas, las repisas, etc. Lo hemos pasado bien bien y me he reido muchisimo. Es increíble lo cachurero que es Mario. Si tenía unos frascos de perfume y cremas guardados que ya estaban vacíos. Y cuando le pregunté para que los guardaba, me dijo : " de bonitos..." jajajajjajjajajjaj Ese es el solo fin de cachurear y juntar cosas. Así que hemos ido seleccionando tambien porque si ponemos todas las cosas " de bonito", no vamos a caber dentro de la casa jajajjajajaja.

En la noche, se escucha el mar murmurando, con la luz del faro iluminando las ventanas. De hecho, me levanté como a las 3 y me fui a sentar en la esquinita del living a mirar el faro como daba vueltas, tapadita con una frazada....Cuando ya pueda colgar el suenacocos va a ser más rico sentarse ahí todavía. El "suenacocos", es como le digo yo a un carillon de madera de cocos, que suena muy lindo con el viento. Ha sido muy rico, muy tierno sentarnos con Mario en living, a armar los muebles y ver todos nuestros cachureos y reirnos de puro contentos que estamos. Yo no quiero que se me olvide eso. Ojalá que no....

A veces, me pregunto si seré capaz de corresponder con toda certeza al amor de Mario. Porque yo sé que me quiere, que me adora. Es feliz de verme feliz.....Yo creo que soy muy egoísta, por toda la perfección que a veces le pido que tenga. Porque a veces, me gustaría que fuera más romántico, más loquillo, no sé....Es puro ego que tengo que controlar no más. No puedo ser así tan caprichito, como me dice él. Pero es mucho más tranquilizador, mucho más sano, que te quieran así como me quiere Mario....Yo lo miro, y yo sé que me quiere. Yo lo sé. Sin mirarlo si quiera. Pero hubo un tiempo en mi vida, que tambien supe lo que era estar queriendo hasta la locura y encontrarse con unos ojos que a veces, parecían llenarse de mí y otras, ser una absoluta desconocida. Eso te envuelve en una incertidumbre que no hace bien. No te deja confiar, no te deja soltar, no te deja crecer. Y por más amor que ponga una, no se puede estar tratando de sostener las cosas sola. Los actos más ordinarios se vuelven un mar de dudas....no sabes si le gustará, si lo rechazará, si lo criticará.....y no le estoy echando la culpa al vago ese ( es con cariño, conste) porque yo debí hacerme conciente de que esa relación no me estaba haciendo bien y no empeñarme en tratar de sostener el amor a toda prueba. Es el amor en sí mismo una prueba, y no necesita "ser sostenido". Y quizás sea esa la razón de porque me levanto a las 3 de la mañana a sentarme ahí en mi sillita. Ese acto me recuerda de que la vida es así : de momentitos, de instantaneas, de pequeñas elecciones. De que puedo levantarme y estar acompañada solo de mi alma y de que es maravilloso, cuando ya me dió frío y sueño, acostarme otra vez y unos brazos gorditos y calientitos me reciben con un " te amo, cariño...."